Saturday 20 October 2018

Sobre Macedonio Fernández


“Y a veces, para que sus reflexiones tuvieran un punto de apoyo en el universo físico, las escribía sobre papelitos azarosos: boletos de tranvía, retazos de cartón, orillas de los almanaques, sin importarle que desaparecieran en seguida.
(…)
Por eso es tan sorprende que se le atribuyeran al menos cinco libros póstumos, entre los cuales está su monumental Museo de la Novela de la Eterna. Tal vez no todo sea de él, lo que confirmaría su idea de que la literatura era una casualidad escrita no por un hombre sino por muchos, como la miel de las colmenas.
(…)
… ninguna experiencia es comparable al placer de existir, y nada fuera de ese placer se justifica: ni el comercio, ni los tormentos del trabajo, ni mucho menos los libros.”
Lugar común la muerte
TOMÁS ELOY MARTÍNEZ