Sunday 28 October 2012

Shun Li y el poeta











Sobre una mujer china que trabaja para pagar su deuda con la mafia que la llevó a Italia y que tiene como objetivo final poder traerse a su hijo de ocho años.

Sobre un pescador jubilado que es yugoslavo pero lleva treinta años viviendo en Italia donde es uno más entre su grupo de jubilados que frecuentan el bar en el que la mafia china envía a trabajar a la mujer.(Varias veces en la película se plantea si él es extranjero o no después de treinta años.)

Todo con una excelente fotografía llena de la melancolía de Venecia (en realidad el bar no está en la turística ciudad de Venecia sino en Chioggia, una ciudad próxima y también recorrida por canales de agua pero que aún es más líricamente decrépita.



Y tiene que ser en Chioggia porque Chioggia es como todos los personajes de la película (y de hecho como todos nosotros): frágil, cambiante, a merced del mar, efímera... parece siempre apunto de desaparecer, apunto de acabar de pudrirse devorada por la humedad y el frío.

Desde el punto de vista de la luz, de la fotografía, me ha gustado especialmente la escena cuando él le enseña su cabaña para pescar en el mar o en la laguna (*). Me gusta ese cielo, ese mar y sobretodo esa luz del sol.

(*)No quedan claros los límites entre el mar (hombre, en una batalla sin fin, dice ella) y la laguna (mujer, calmada, dice ella). Pero esta diferenciación entre el mar y la laguna es esencial en la película porque es la diferencia entre el combate seguramente inútil, desesperado y que solo puede llevar a la derrota, y la resignación calmada, el aceptar la esclavitud, la tristeza. Y por eso ese momento en la película en el que un personaje, aparentemente secundario, explica que el agua del mar, o sea el agua viva, entra y sale constantemente de la laguna pero hay una pequeña parte de agua del mar que queda atrapada, estancada en la laguna...


A él le llaman "el poeta" porque hace rimas para sus amigos del bar. Pero durante la película vemos claramente que realmente es un poeta. Y ella también y algún otro personaje. De hecho esta es una película poética en la que se muestra el enfrentamiento entre los poetas y quienes no lo son. 
Además la película nos muestra la tradición china de dejar velas encendidas sobre el agua en memoria de su poeta Qu Yuan (al que le piden deseos).

Es una película poética por la sensibilidad de la historia, por la impresionante fotografía, por los encuadres, por le acompañamiento musical,...

Todos los actores están muy bien pero sin duda yo destaco la interpretación de Zhao Tao.

Recomiendo esta película